Mudarse de ciudad siempre supone un cambio importante, pero no solo para ti, sino también para tu mascota. Si tienes gato y estás pensando en realizar una mudanza a Bilbao, es fundamental que planifiques cada paso teniendo en cuenta su bienestar.
Los gatos son animales muy territoriales y sensibles a las alteraciones de su entorno, por lo que una mudanza puede generarles estrés si no se gestiona correctamente. Por eso, desde Azkar Mudanzas nos gustaría darte una serie de consejos que te ayuden a realizar el traslado de la manera menos traumática para tu felino y más fácil para ti.
Pautas para realizar una mudanza a Bilbao con un gato
1.- Antes de la mudanza: preparación es clave
Lo primero que debes hacer es acostumbrar a tu gato al transportín semanas antes del traslado. Déjalo abierto en casa con su manta y algunos premios para que lo asocie con una experiencia positiva. El día de la mudanza, es recomendable mantenerlo en una habitación tranquila y cerrada, lejos del ruido y del movimiento de cajas.
Consulta con tu veterinario si sería recomendable usar feromonas sintéticas para reducir su ansiedad. Además, asegúrate de tener su cartilla al día, ya que en Bilbao deberás empadronarlo si vas a quedarte a vivir más de tres meses en la ciudad. Si vienes desde fuera del País Vasco, infórmate también sobre veterinarios cercanos en tu nuevo barrio.
2.- Durante el viaje: seguridad ante todo
Durante la mudanza a Bilbao, tu gato debe viajar siempre en su transportín, bien sujeto con el cinturón de seguridad si vas en coche.
Evita abrirlo mientras estés en ruta, aunque parezca tranquilo. Si el viaje es largo, haz paradas frecuentes para revisar su estado, pero sin sacarlo del transportín para evitar que rechace volver a meterse en él. Consulta cómo actuar con tu veterinario por lo que pueda pasar.
3.- La llegada a Bilbao: un aterrizaje suave
Una vez en tu nuevo hogar en Bilbao, no lo sueltes por toda la casa desde el primer momento. Lo ideal es habilitar una habitación tranquila con sus objetos familiares: comedero, arenero, juguetes y manta. Deja que explore a su ritmo, sin forzarlo, y ve abriéndole el resto de la casa progresivamente.
Bilbao es una ciudad grande y, por tanto, seguro que con múltiples estímulos urbanos alrededor de la vivienda. Si tu vivienda tiene terraza o balcón, asegúrate de que sean seguros y no exista posibilidad de que el gato se escape o caiga. Las redes de protección son una excelente idea.
4.- Adaptarse a su nuevo hogar: rutinas y tranquilidad
Una vez instalado, mantén sus rutinas habituales: horarios de comida, tiempo de juego y momentos de descanso. Los gatos valoran la previsibilidad, especialmente en entornos nuevos. También es recomendable colocarle un microchip si aún no lo tiene, ya que en Bilbao, como en muchas otras ciudades, es obligatorio y aumenta las posibilidades de encontrarlo si se pierde.
Una mudanza a Bilbao con tu gato puede ser una experiencia tranquila si cuidas cada detalle. Lo mismo que podemos decirte si tienes otros animales de compañía, sea un perro o un pájaro. Con paciencia, previsión y cariño, y también con la ayuda de una empresa profesional como la nuestra, tu mudanza irá sobre ruedas. Llámanos si buscas una empresa con experiencia de mudanzas económicas a Bilbao.